La Cámara de Comercio Americana (AmCham) escogerá este jueves a su nuevo presidente, luego que Mario Arana concluyera su segundo periodo de gestión consecutiva y, de acuerdo con los estatutos de la organización, ya no puede optar a una segunda reelección. Pero antes de irse Arana hizo un balance de su gestión, en el que alertó sobre la táctica del régimen de Daniel Ortega de ganar tiempo para permanecer en el poder, lamentó la división en la oposición y demandó elecciones justas y transparentes, porque de lo contrario el futuro de Nicaragua no es prometedor.
Según Arana, cuando asumió por primera vez la presidencia de AmCham en el 2019, tenía la esperanza de que mediante una negociación se lograra una salida a la crisis política que estalló en el 2018, para recuperar la estabilidad en Nicaragua, “y no fue posible”. Eso debido a la falta de voluntad política por parte del Gobierno, su “juego de seguir ganando tiempo”.
Para Arana otro factor que “quizás tampoco ayudó (a la falta de salida de la crisis fue) la desarticulación de nuestra sociedad, con sus múltiples voces y agendas”.
Asimismo recordó que como “gremio tenemos la necesidad y obligación de contribuir a asegurar el mejor clima de negocios, para el desarrollo del comercio y la inversión. Pero para nadie es un secreto que está siendo difícil recuperar la gobernabilidad y la economía y que a la crisis política le ha seguido la pandemia del Covid-19”.
El expresidente de AmCham también instó al sector privado a continuar participando en el proceso de encaminar al país a la estabilidad, para luego desarrollar un modelo de desarrollo incluyente, una tarea que está pendiente para asegurar que la estabilidad que se recupere sea sostenible de largo plazo.
“Este año el desafío para el sector privado a la vez en este contexto es asumir el reto y comprometernos con incidir en que se den las condiciones y reformas electorales, para un proceso limpio y transparente de elecciones, con observación nacional e internacional. Entonces, podremos emprender una reconstrucción económica con apoyo de la cooperación internacional y de la inversión extranjera directa, a como se requerirá. Hay que persistir y presionar, para que eso sea lo que ocurra”, enfatizó.
Y mientras Arana reclamaba estabilidad en Nicaragua, en las afueras de AmCham se apostaron patrullas de antimotines acechando las instalaciones de la cámara. Lo que no sabían los agentes de la dictadura es que en esta ocasión, debido al coronavirus, la Asamblea General de Socios se celebraría a través de Facebook live, mediante el cual Arana presentó los resultados de sus gestión 2019-2020.
Pese al inclemente sol, las fuerzas antimotines mantienen rodeado el edificio. Estados Unidos es el principal socio comercial de Nicaragua y en AmCham están asociadas las empresas de capital estadounidense o que tienen vínculo comercial con dicho mercado.
“El futuro económico y por ende social de Nicaragua está muy ligado a como se den estas elecciones. Y es clave que las mismas tengan legitimidad. El futuro de todos, de no ser ese el caso, no sería muy prometedor”, dijo Arana en su discurso.
Tras celebrar que ahora haya más aspirantes a la Presidencia para las elecciones de noviembre de este año, Arana recordó que para el Gobierno la división y la abstención es lo que buscan. La oposición entiende que la unidad y la participación masiva juega a su favor.
“Para el sector privado, la legitimidad de las elecciones es clave. Pero los que quieren un cambio de gobierno encuentran a quienes dicen que todo lo que se necesita es una casilla útil, un buen candidato y recursos financieros, y se tiene una fórmula ganadora. Otros análisis, no pocos sustentados, dicen que si bien eso es posible, tiene sus riesgos si la oposición va dividida a como podría ser el caso si por un lado va el PLC, por otro la Coalición, y por otro la Alianza Ciudadana”, expresó.
Ya en declaraciones a LA PRENSA, Arana dijo que “entre los logros alcanzados durante el 2019-2020, AmCham estrechó los lazos con las Cámaras de Comercio de América Latina, y se fijaron metas para los próximos cinco años, como fortalecer un centro de promoción de inversiones, para aprovechar el Tratado de Comercio DR-Cafta”, cuyo trabajo se comenzará este año.
Entre los candidatos para ocupar varias vacantes dentro de la junta directiva para el período 2021-2022 están Gabriel Pasos, Mario Alberto Rappaccioli, César Augusto Lacayo y Roberto Espinoza. Se repostulan Alberto Baltodano, Álvaro Molina y Claudia Neira.
De la actual directiva correspondiente al periodo 2019-2020 tres miembros decidieron no competir, Giancarlo Braccio, Mario Arana y Jeannette Duque-Estrada. Arana, como expresidente, se mantiene como presidente con voz y voto, según establecen los estatutos.
