El régimen de Daniel Ortega mantiene al Mar Caribe en agenda. Este miércoles 17 de marzo, la Asamblea Nacional aprobó un decreto de adhesión para protección y desarrollo en dicha plataforma marítima. Sin embargo, el ecólogo Fabio Buitrago Vannini advierte que ese decreto se trata de un documento vacío que carece de los elementos materiales y administrativos necesarios para poder cumplir con los objetivos.
De acuerdo con los diputados orteguistas, la iniciativa busca fortalecer el marco jurídico del país en materia de conservación de recursos marinos y también poder acceder a asistencia técnica y económica.
La iniciativa de Adhesión al protocolo relativo a las áreas y la flora y fauna silvestre, especialmente protegidas del convenio para la protección y el desarrollo del medioambiente marino en la región del Gran Caribe fue aprobada con 73 votos a favor y ninguno en contra.
El experto explicó que Nicaragua tiene potestad para tomar decisiones de manera unilateral, en lo que compete a su territorio en el Mar Caribe, y señaló que la adhesión de Nicaragua a este protocolo solamente es una ratificación de que el Gobierno tiene la voluntad de contribuir con la conservación de especies de flora y fauna que están especialmente amenazadas, y también las áreas por donde estos animales transitan, de manera que las áreas desprotegidas también gozarían de protección. Aunque el decreto “se trata de un documento vacío que todavía carece de los elementos materiales y administrativos necesarios para poder llevarse a cabo y hacerse cumplir”, agregó.
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Durante su intervención, el diputado orteguista José Figueroa, miembro de la Comisión de Asuntos Exteriores que dictaminó favorablemente el decreto el viernes pasado, argumentó que “el protocolo relativo a las áreas y a la flora y fauna silvestre especialmente protegidas, es uno de los tres protocolos para la protección y desarrollo de los medios marinos de la región del Gran Caribe y tiene como dos objetivos principales la protección y preservación, y la gestión sostenible de zonas que presenten un valor ecológico particular, y la protección y preservación de especies silvestres amenazadas o en vías de extinción”.
Según Figueroa, en la consulta del decreto participaron autoridades del Ministerio de Recursos Naturales, Ministerio de Relaciones Exteriores, Procuraduría General de la República, Ejército y la Comisión del Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Asamblea. “Todos manifestaron su apoyo y respaldo total al decreto legislativo”, dijo el diputado.
Agrupa esfuerzos de conservación
Este protocolo de conservación de los recursos del Caribe fue promovido inicialmente en 1990, bajo la llamada Declaración de Cartagena, pero fue reconocido como un esfuerzo internacional en el año 2000, desde entonces ha sido ratificado por 16 países.
El Convenio se centra sobre temas como las fuentes de contaminación terrestres, el impacto de los desechos en el mar, la contaminación por los barcos, la protección de la biodiversidad y la polución atmosférica.
A finales de enero de este año, los diputados del Frente Sandinista también aprobaron mediante una ley la creación de una reserva de biósfera en el Mar Caribe, lo que generó la protesta por parte de Colombia, ya que consideró que Nicaragua tomó la decisión unilateralmente y afectaba parte de la extensión marítima que el país suramericano considera suya.