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La Azul y Blanco tiene programado dos partidos en la primera fecha FIFA del año. LA PRENSA/ CORTESÍA/ LEONEL RODRÍGUEZ/ FENIFUT

Las preocupaciones del técnico de la Azul y Blanco para los partidos decisivos en las eliminatorias mundialistas

La Azul y Blanco, dirigida por Juan Vita, define su futuro camino a Catar 2022 ante Belice y Haití el 4 y 8 de junio

Juan Vita y la Liga Primera tendrán una reunión de trabajo en los próximos días para ver el cierre del calendario en el campeonato nacional. El técnico argentino de la Azul y Blanco señaló que en ese encuentro analizarán la factibilidad de poder contar con seleccionados en mayo para preparar los partidos decisivos contra Belice y Haití el 4 y 8 de junio, respectivamente, en la culminación de la eliminatoria mundialista Catar 2022.

“Si el calendario permite hacer un microciclo y un amistoso en mayo, sin que afecte el rendimiento del jugador o provoque una sobrecarga física lo haremos, si no, estiraremos la convocatoria previo al 4 de junio”, revela Vita, quien destacó el apoyo permanente de la Liga cediendo los jugadores fuera de fecha FIFA. “Los jugadores se deben a los clubes, vienen las etapas más importantes y me interesa que en el club les vaya bien porque llegan mejor a la selección”, afirma el argentino.

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Vita no está apurado en reunir a todo el grupo en mayo, porque sabe que el calendario está cargado para los seleccionados y le preocupa el cansancio físico y mental que pueden acumular para los desafíos ante Belice y Haití. En junio se encontrará con una disyuntiva. Por una parte habrá un grupo de jugadores que militan en la Liga Primera y el futbol costarricense con un exceso de juegos, sobre todo los que clasifique a la final, y otro grupo que no tendrá ritmo de juego porque dejaron de competir a principios de mayo.

“La planificación se está terminando de armar con base a eso (los jugadores que terminan jugar en mayo y los que siguen). Si Santos (Douglas Forvis y Jason Ingram), Jicaral (Francisco Flores) o Cartaginés (Byron Bonilla y Carlos Montenegro) no clasifican, habrá que enviarles a esos jugadores un plan especial de entrenamiento y estar pendiente que lo cumplan. Ahora, el jugador que llegue hasta la final, en Nicaragua o Costa Rica, terminará el torneo a finales de mayo y llegará al primer partido con una carga física y mental importante”, explica Vita, quien en mayo trabajará con los seleccionados del ámbito local que no estén en la final.

Otro aspecto que le preocupa a Vita es la llegada de Ariagner Smith desde Bielorrusia y Matías Belli desde Noruega, por las restricciones y complicaciones para viajar debido al Covid-19. “En épocas de pandemia ningún jugador de fuera está fijo”, argumenta el seleccionador. “Los jugadores fuera del continente tienen viajes muy complicados, la federación hizo un gran esfuerzo  para que Smith y Belli llegaran en las mejores condiciones. Esperamos poder tenerlos, tengo la fe, pero no lo puedo garantizar porque en tiempos de Covid-19 no hay garantía de nada”, sentencia.

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