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Canelo Álvarez y Billy Joe Saunders durante el pesaje oficial. LAPRENSA/CORTESÍA

Canelo busca ser Julio César Chávez ante 70 mil personas en Texas

Canelo ha conseguido engrandecer su figura como el peleador más importante del mundo. Todos quieren una foto con él, desde políticos hasta artistas, ya ni mencionemos al público. Sin embargo, para entrar en la historia le hace falta un ingrediente a su fórmula

Julio César Chávez se mantiene siempre presente en la memoria de los mexicanos. Unos porque lo vieron y otros más jóvenes porque les han contado sus hazañas en el ring. A Chávez no le importaban los riesgos, podía ir ganando claramente la pelea y eso no bastaba, siempre buscaba el nocaut. Cuando el ídolo azteca se bajó del vehículo en el pesaje oficial en las afueras del AT&T Stadium en Arlington, Texas, para comentar en TV Azteca, el público vibró. Vestía un traje azul y se veía diminuto, pero su grandeza salpicaba a todos los presentes. El público se emocionó tanto o más que cuando subió Canelo y posó en el careo ante Billy Joe Saunders.

Canelo ha conseguido engrandecer su figura como el peleador más importante del mundo. Todos quieren una foto con él, desde políticos hasta artistas, ya ni mencionemos al público. Sin embargo, para entrar en la historia le hace falta un ingrediente a su fórmula: tomar riesgos. Canelo es más pensante, si tiene el combate en el bolsillo: “¿para qué exponerme?”, seguro piensa, pero esa cualidad es lo que le ha restado espectacularidad. En otros combates, como contra Mayweather, decidió terminar de pie la pelea y se dedicó a sobrevivir alejado del perímetro de los acontecimientos. Luego ante Chávez Jr., la gente esperaba más de él contra un rival inerte. Canelo hizo una buena pelea, hasta ahí no más.

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Más allá de su última pelea en Miami contra Yildirim, quien fue un sparring oficial, necesita demostrar esa faceta para seguir alimentando su leyenda y su negocio. Los fanáticos se pueden cansar de esperar los fuegos artificiales ante oponentes de nivel como Saunders, campeón de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) en las 168 libras. El británico es respetado por su récord invicto (30-0 y 14 KO), además por sus dos defensas y ha expresado que no existen excusas en su preparación ni cláusula que lo disminuya sobre la tarima este sábado. No obstante, Saunders no tiene pegada. Gana a base de pelear a la larga distancia y aprovechar sus brazos largos.

Canelo tomó la pelea porque sabe que conseguiría más repercusión noqueando a un invicto establecido en las 168 libras, mientras él baila en diferentes categorías. También ratificó su objetivo del nocaut y agregó que solo los primeros asaltos serán difíciles, como si tuviera una bola del futuro. El mexicano, monarca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y Asociación Mundial de Boxeo (AMB), tratará de agregar ese ingrediente restante en su exitosa carrera: tomar riesgos, buscará emular al gran ídolo Chávez y crujir los huesos de Saunders ante 70 mil fanáticos. Si Canelo da ese paso al frente y arriesga más el físico, conseguirá su propósito frente a un correlón como el británico.

Deportes Canelo Álvarez Julio César Chávez

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