14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Cristian Tinoco, y su madre Deyanira Parrales, se presentaron al Complejo Policial ¨Evaristo Vasquez¨ para entregar alimentos a su papa el exvicecanciller y dirigente de UNAMOS, Victor Hugo Tinoco quien fue detenido el pasodo 14 de junio hoy 23 de junio de 2021, en Managua Nicaragua. Foto: Jader Flores/La prensa

Cristian Tinoco, hija de Víctor Hugo Tinoco: “Si el cáncer trae mucho sufrimiento, tener a tu padre desaparecido es peor”

Desde que su padre fue detenido, la salud de Cristian Tinoco ha empeorado. Ella es una paciente con cáncer y su padre era su máximo apoyo

Contenido Exclusivo CONTENIDO EXCLUSIVO.

Cristian Tinoco habla con dificultad. La quimioterapia a la que es sometida para tratar el cáncer de mama que padece la debilita completamente. A pesar de ello, accedió a hablar con LA PRENSA por su padre, dice, porque es lo menos que puede hacer por él.

Estaba casi recién nacida cuando su padre, a los 23 años, andaba enmontañado con el Frente Sandinista para combatir a la dinastía somocista. Cuando triunfaron los guerrilleros y asumieron el poder en 1979, su padre Víctor Hugo Tinoco fue nombrado embajador de Nicaragua en Naciones Unidas y años más tarde, vicecanciller.

Hoy es preso político, irónicamente, de sus excompañeros de armas sandinistas, junto a otros disidentes y fundadores del Movimiento Renovador Sandinista (ahora UNAMOS).

En esta entrevista, Cristian recuerda al hombre que en los ochenta llegaba de viaje y pasaba tiempo con sus hijos, y que en los últimos meses en que su situación de salud ha empeorado, ha estado con ella para darle masajes, estar con ella en sus sesiones de quimioterapia, o simplemente para acompañarla.

¿Cómo se encuentra de salud en este momento?

En este momento me siento bien, con las molestias normales de la quimioterapia que me pusieron hace siete días. Ya van aminorando, y esperando en Dios que el líquido que hay en el abdomen no se siga acumulando más.

¿Cuáles son las molestias normales de una quimioterapia?

Nauseas, dolor óseo o dolor en los huesos muy fuerte que te pueden sacar hasta las lágrimas. Yo estoy tomando también medicamentos muy fuertes para el dolor. El dolor en los huesos solamente se me puede calmar un poquito con el uso de tramadol. Otra molestia son movimientos involuntarios, entumecimientos de los dedos de las manos y los pies. Estreñimiento también te da la quimioterapia y yo no puedo beber mucho líquido porque ya tengo demasiado en el abdomen. También los dolores abdominales. A veces yo estoy tranquila y me agarra un dolor que me retuerce.

La situación con su padre, ¿cómo ha empeorado su salud?

Cuando me diagnostican este problema fue en abril de este año. Yo ya tenía líquido en el abdomen, pero a raíz de lo que pasó con mi papá el volumen abdominal ahora es como el de un embarazo de seis meses. Me cuesta respirar porque el líquido me comprime el diafragma, así que tengo que estarlo drenando. La última vez me drenaron casi tres litros de líquido y obviamente me sentí mucho mejor. Mi papá era un apoyo muy grande para mí. Llegaba al cuarto, me daba masaje en los pies, en las piernas, se ponía a platicar conmigo. Él es un padre muy amoroso y muy dedicado a sus hijos.

LEA TAMBIÉN: Álvaro Somoza, hijo de Luis Somoza: “No digo que el sandinismo va a ser fácil, pero era más difícil Somoza y salió”

La detención de mi padre trajo mucho llanto, mucho sufrimiento. Si el cáncer de por sí trae mucho sufrimiento, el tener a tu padre desaparecido ya es peor. Es incierto, porque uno espera que realmente esté en El Chipote, pero no nos han dado ni una prueba de vida de que él está ahí. Si él está detenido, ¿por qué no lo muestran?

¿Qué es lo que sí ha podido saber de su padre?

Nos siguen pidiendo las medicinas. Por eso nosotros pensamos que él está ahí (Auxilio Judicial). Las pastillas de la presión las agarran. Algo que a mí me preocupa es el uso de un medicamento que mi papá no usaba normalmente, que es bolaria, y ese medicamento es para el vértigo. ¿En qué condición estará que está con ese vértigo? Nos mandaron a pedir tobilleras también porque tiene un esguince en uno de sus pies. Lloramos cuando nos dijeron que tenía un esguince. Si estás en la cárcel y lo que estás es sentado o acostado, ¿a qué hora te hacés un esguince? ¿Cómo no se lo hizo en todos los años que él jugó futbol? ¿Cómo no se lo hizo en todo el tiempo que hacía ejercicio y caminaba aquí en la casa que el área es bastante irregular? Uno llega a suponer hasta lo peor.

¿Su padre padece de alguna enfermedad?

Sí, padece de hipertensión, problemas de asma, problemas de bronco espasmo. Como que se le cierra la tráquea y no puede respirar. A veces también le da ansiedad. Es una persona que vivió la guerra y tiene traumas de guerra. Tiene un padecimiento que es el síndrome de Méniére, que él tenía casi más de 15 años de no tenerlo. Es un síndrome que se caracteriza por mareos, súper fuertes y un silbido en los oídos bastante fuerte y no te podés poner de pie. Eso surgió a partir del encarcelamiento. Él no tenía eso. Es un síndrome que él tiene diagnosticado, pero que obviamente se exacerbó por la condición aguda de estrés de haber sido encarcelado y no sabemos en qué condiciones está siendo tratado.

¿Cómo se dan cuenta que está padeciendo este síndrome nuevamente?

Por los medicamentos que nos piden. Ellos nos piden el vontrol, y el vontrol no existe en el país, no hay. Ese es un medicamento que mi papá usaba para el síndrome de Méniére. Le preguntamos a un médico y nos dijo que le diéramos bolaria. Ya llevamos dos meses con bolaria y nos preocupa porque quiere decir que sigue con los mareos y no tiene acceso a una persona especialista en este problema que lo pueda revisar, porque pareciera que ahí (Auxilio Judicial) solo hay médicos generales.

¿Cómo se dio cuenta de la detención de su padre?

Pasó un vehículo civil todo el día frente a la casa, tipo sedán, negro con los vidrios polarizados. Ya sabíamos que habían detenido prácticamente a casi todos los miembros de UNAMOS y ya esperábamos la detención de mi papá. Él fue a comer en la noche con una hermana y mi otro hermano, y desde que van a comer lo detiene la Policía en la entrada del residencial, a unos 200 metros de la casa, le pidieron la cédula, le tomaron foto. Después lo van siguiendo varios vehículos civiles hasta Galerías Santo Domingo, y ya cuando salen de regreso faltando unos diez minutos para las nueve, detienen el carro de mi hermano y de una camioneta negra se bajaron varios de la DOEP y procedieron a bolsear a mi papá, requisándolo para ver si no andaba armado, y lo metieron a la camioneta. Mi hermana estaba grabando, pero un policía le retorció el brazo y le robaron su celular, y mi hermano me logró llamar y me dijo que se habían llevado a mi papá.

¿Le presentaron orden de detención?

Nada. Lo agarraron y se lo llevaron. Ya después sacaron su comunicado de que mi papá está detenido por la famosa Ley 1055 que se inventaron el año pasado, y así ya nos dimos cuenta que estaba detenido y nos allanaron la casa.

Víctor Hugo Tinoco fue embajador de Nicaragua ante Naciones Unidas y vicecanciller durante la década de los ochenta. AFP

¿Cómo fue el allanamiento?

En ese momento sí traían ellos una orden judicial. Comenzaron a sacudir los portones, yo me asomo por la ventana y veo a los policías. Yo lo que hice fue grabar un Facebook live para alertar que nos estaban allanando. Éramos siete mujeres, incluyendo a mi abuelita de 90 años, frente a 30 hombres fuertemente armados dentro de la casa. Teníamos miedo. Yo hablé con el comisionado que estaba al frente del allanamiento y le dije: “Mire, nosotras somos personas de fe. Aquí solo hay mujeres”. No sé por qué ellos venían buscando un hombre. Aquí el único hombre que vive es mi papá. Entonces el comisionado me dijo: “No les vamos a hacer ningún daño si ustedes cooperan”. Nosotros cooperamos, pero uno queda con un daño psicológico y emocional. Yo no pude dormir esa noche.

¿Se llevaron algo?

Sí. Ellos se concentraron en el cuarto de mi papá, en su ropero. Comenzaron a revisar documento por documento. Lo que se llevaron era su pasaporte, una tablet, una computadora, su celular y una invitación que le hizo una fundación alemana que tiene que ver con el partido socialdemócrata. Ese documento lo querían tomar como injerencia, pero cabe señalar que esa es una invitación del año 2005, pero para ellos era prueba y hasta se miraban felices cuando la encontraron. Esa fundación invitó a mi papá a que fuera a Alemania para que explicara cómo estaba la situación política del país.

Yo anduve con el perito cuarto por cuarto y te intimida. Les toman fotos a tus familiares y te va preguntando: “¿Esta niña quién es? ¿Hija de quién es?”. Todo este martirio fue por tres horas y media de horror. Estábamos muy nerviosos. Vinieron a las tres de la tarde y se fueron a las seis y media.

Usted ha sido la más visible demandando la liberación de su padre a pesar de su situación de salud, ¿Por qué usted y no alguna de sus hermanas u otro familiar?

Es que yo fui la primera que hizo un Facebook live. Yo no sabía cómo era eso, pero mi papá nos había dicho: “Si vienen y me echan preso hagan un Facebook live”. Luego el día del allanamiento hice otro porque yo era la única persona que lo podía hacer. Recuerdo que el comisionado hasta se enojó y me dijo: “Usted subió un video”. Me imagino que lo regañaron y le dijeron que cómo era posible que yo haya hecho un video estando ellos ahí. Pero yo lo hice poco antes de que entraran a la casa.

Y también los medios a quién quieren entrevistar es a mí, y yo la verdad no quisiera dar tantas entrevistas por mi condición de salud, no crea, en serio me siento mal. En mi familia hemos quedado que yo me encargue de la prensa porque pues mi familia me dice “la gente te está llamando a vos”. Tengo una hermana que se está encargando de todo el tema legal, con los abogados, y así nos hemos repartido las tareas. Para mí ha sido cansado, porque para no salir tan demacrada como estoy medio me arreglo, me maquillo, me visto y pierdo mi comodidad en la que estoy, pero yo todo eso lo hago por mi padre, aunque me sienta mal. Todo lo hago por mi padre.

LEA TAMBIÉN: Lesbia Alfaro, madre de Lesther Alemán: “A Lesther lo criamos así, bien fuerte”

¿Cómo recuerda a su padre durante su infancia?

Hay dos etapas que son cuando fue embajador en Naciones Unidas y cuando fue vicecanciller. Yo recuerdo más cuando fue vicecanciller. Él viajaba mucho, pero cuando estaba en Nicaragua, era un tiempo de calidad para nosotros. Él se acostaba con nosotros, nos hacía el avioncito, nos llevaba al mar o a Xiloá. Él siempre fue un papá bastante cariñoso.

Sectores liberales le señalan a su papá y a varios dirigentes de UNAMOS de haber cometido crímenes durante la década de los ochenta

Es bien difícil. No podemos juzgar a todas las personas por igual. Mi papá no estaba en el grupo de los nueve (comandantes del FSLN). Mi papá es un hombre que está a favor de la vida, es un hombre que estudió para ser sacerdote diez años. Después estudió cinco años para ser médico y después se internó en la montaña para salvar a su país y le dijo a mi mamá: “Si no vuelvo, decile a mis hijas que morí por salvar a mi patria”. Él tenía eso. No era un hombre violento, pero en ese momento a sus 23 años dijo “tengo que ir”, porque era la única manera que veía para sacar a la dictadura de Anastasio Somoza.

Después de 1980 a 1985, él estuvo prácticamente fuera del país. Él no pudo haber sido cómplice porque no estuvo en la toma de decisiones, por ejemplo, con el Servicio Militar Obligatorio. Y de 1985 en adelante, mi papá estuvo más bien como vicecanciller en los acuerdos de paz, y se dieron las elecciones de 1990. Así que él tenga que ver mucho con la muerte de tantos jóvenes, no sé si sea así porque él no estaba en la toma de decisiones.

También mencionan “la piñata”

No podemos tapar el sol con un dedo. Claro que hubo una piñata, pero la casa, donde estoy yo ahorita, no es una casa piñateada. Esta casa mi papá se la terminó de pagar al banco. La persona que vivía aquí, se fue y no la había terminado de pagar al banco. Incluso esa persona visitó esta casa y platicó con mi papá.  Mi papá pagó esta casa, no es una casa que se la regalaron por ser parte del Frente Sandinista. Él la pagó con lo que pudo ahorrar.

Cristian Tinoco, y su madre Deyanira Parrales en Auxilio Judicial solicitando información sobre su padre Víctor Hugo Tinoco. LA PRENSA/ Jader Flores

Plano Personal

Cristian Deyanira Tinoco Parrales tiene 42 años. Nació en Jinotepe, pero vive en Managua.

Es la segunda de seis hijos que tuvo el exvicecanciller Víctor Hugo Tinoco, quien hoy es preso político de Daniel Ortega.

Estudió medicina en la UNAN Managua y luego oftalmología en el Centro Nacional de Oftalmología.

Se especializó en cornea y cirugía refractiva en la UNAM de México, país en el que trabajó durante seis años.

Fue en México donde le diagnosticaron cáncer de mama, así que decidió regresar a Nicaragua, y siguió trabajando como oftalmóloga.

Desde abril del 2021 su oncóloga le prohibió vivir sola por una metástasis que le diagnosticaron, lo cual agravó su situación de salud.

Su padre era el que estaba pendiente de su cuidado. La llevaba a sus sesiones de quimioterapia, y la acompañaba en su cuarto casi todo el día. Ahora que está detenido, a Cristian le ha afectado negativamente en su salud la ausencia de su padre.

 

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí