14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Ramón Mendoza, hermano del preso político Miguel Mendoza. Jeiner Huete/Cortesía

Ramón Mendoza, hermano de Miguel Mendoza: “Queremos que mi hermano salga libre por cualquier mecanismo o cualquier medio. Estamos desesperados”

El hermano del cronista deportivo dice que cualquier método en el que se consiga la liberación de los presos políticos es válido, pero sobre todo urgente. Además, dice, solo los familiares conocen la angustia por la que están pasando desde hace meses.

Contenido Exclusivo CONTENIDO EXCLUSIVO.

Para hablar con la Revista Domingo, don Ramón Mendoza dice que será muy franco en cada respuesta. Solamente piensa en la situación de su hermano, el preso político Miguel Mendoza. Su detención le ha traído una gran angustia a su familia, y ha tenido que jugárselas para que la mamá de Miguel no se dé cuenta que él está en una celda de castigo en el Chipote.

Esta semana, los familiares de Miguel y de otros presos políticos firmaron un pronunciamiento en donde solicitan a Daniel Ortega, a las fuerzas vivas de la nación y a la Iglesia católica, que encabecen un proceso de unificación ciudadana. Esto ha sido interpretado como una petición de diálogo por algunos sectores, y don Ramón no lo niega.

También dice que respeta a los familiares que han decidido no firmar la petición por el momento, pero él cree que cualquier método para que su hermano sea liberado es el mejor, que solamente cada familia de los reos políticos conoce la situación dura por la que están atravesando desde hace meses. “Estamos desesperados”, comenta.

¿Cómo se encuentra su hermano en este momento?

Miguel continúa en la celda de castigo. La tortura psicológica continúa porque no recibir comunicación con su niña pequeña de siete años, eso para él es una tortura. Y luego las mismas condiciones en las que se ha mantenido en estos siete meses de cárcel. No se le ha permitido hablar con su abogado ni una sola vez. No le permiten que se le meta ni una sábana o una frazada, solamente agua y medicamentos recibe. Alimentación no han permitido en lo absoluto. Las condiciones de Miguel y de todos los reos de conciencia siguen siendo las mismas, sin variante alguna. Hay interrogatorios a cualquier hora del día y de la noche. Lo llevan esposado, con la cabeza hacia abajo como si fuera un delincuente.

¿Qué les ha dicho en las visitas que han tenido con él?

Margin (esposa de Miguel Mendoza) ha ido a las cinco visitas. Mi hermana ha ido en tres ocasiones y el sábado pasado fui yo, y Miguel lo que nos dice es que está fuerte espiritualmente. Él está orando y tiene la esperanza en Dios que pronto va a salir de la cárcel. Pero al igual que los otros presos, ellos no tienen comunicación alguna. No se dan cuenta de lo que está pasando en el exterior, de lo que se está hablando, lo que se dice. Prácticamente él se da cuenta hasta que tiene la visita que lo ponemos al día de las cosas que están pasando, pero él ahí en absoluto no sabe nada. Lo último que él envía es agradecimiento a la gente. Le contamos que están pendiente de él y pidiéndole oraciones. Le manda saludos y abrazos tanto a LA PRENSA que ha dado seguimiento a su caso, a los periodistas, y a familiares y amigos.

LEA TAMBIÉN: Eurodiputado Javier Nart: “Nosotros no estamos dispuestos a sentarnos con cualquier cosa”

Él pregunta sobre la gente. ¿Qué dice la gente? ¿Qué expresión tienen en relación a su caso? Y pregunta sobre lo que está pasando. También sobre la situación de salud de nuestra madre que es algo que lo está martirizando porque mi mamá es una señora de más de 90 años que está enferma. También está con preocupación por su hija. Más que todo es eso. Miguel está en una celda de dos por dos. Está solo y ya prácticamente tiene 18 o 19 días de estar solo ahora porque antes estaba con un joven que hace poco lo apresaron.

Entiendo que la mamá de Miguel no sabe que él está detenido

Nosotros no le hemos querido decir a nuestra madre porque tenemos temor a que pueda tener un colapso. Mi mamá hace seis años tuvo un derrame cerebral y ella quedó muy sensible. Es una señora de más de 90 años y tenemos temor por ella. Por eso no le hemos dicho. Para ella es extraño no recibir llamadas de él, no verlo. Que él no haya venido en las fiestas de diciembre, para ella eso es extraño, sin embargo, nosotros lo que le hemos dicho es que Miguel está fuera del país, que ha tenido problemas con esto de la pandemia, que estuvo enfermo, que no podía salir y ahora pues que estaba fuera de Nicaragua. Que andaba cubriendo algunos trabajos en México. Ella por supuesto, en medio del pesar y el dolor que le embarga el no verlo y no saber, pues eso por lo menos la hace sentirse un poco más tranquila.

¿Cómo le ha impactado a usted y al resto de su familia la situación de Miguel?

Es una angustia para toda la familia no saber qué va a pasar. Sabemos que Miguel no ha cometido ningún delito. Lo único que ha hecho es hacer uso de su derecho constitucional al expresarse libremente. Expresarse diferente al Gobierno o a cualquier poder no es ningún delito. A él la Constitución le da ese derecho y la Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 19. Estamos clarísimos, la familia, que no ha cometido ningún delito. Lo apoyamos y vamos con él hasta las últimas consecuencias.

Esta semana se reactivó el caso en contra de su hermano

Esa ha sido una arbitrariedad y una ilegalidad que se ha cometido no solamente con Miguel, sino con todos los reos políticos. Aquí hay una nulidad total del debido proceso que se le ha llevado. Nosotros esperamos y confiamos porque el único árbitro, el único abogado y el único juez por excelencia es Dios, y nosotros tenemos fe y confianza en Dios, de que puede revertirse la situación. Siempre con la esperanza de que Miguel pueda salir en libertad.

Miguel Mendoza ha sido acusado por menoscabo a la integridad nacional. Miguel Mendoza jamás ha sido político, jamás ha instado o incitado a que haya intervención o medidas drásticas contra personas o contra el Gobierno de Nicaragua. Nunca. Lo que él ha hecho es ponerse al lado de los pobres, estar consciente que hay una situación que debe cambiar en Nicaragua y él por lo que ha luchado es por libertad y democracia. Lo que ha hecho es hacer públicas sus ideas a través de su Twitter y sus páginas en redes sociales. Ese es el delito que el Gobierno le ha imputado a Miguel. Las únicas pruebas que tiene son sus tuits y son sus publicaciones.

Hubo un pronunciamiento firmado por familiares de presos políticos pidiendo una “unificación ciudadana”. ¿Cómo ve esta acción?

Estuvimos hablando de eso el día que lo vimos y Miguel nos dijo: “Si hay diálogo, que sea con los que estamos dentro (de Nicaragua)”. Miguel está claro que con un diálogo se podría resolver el problema. Los familiares de los reos políticos somos los que más estamos sintiendo la ausencia, somos los que más sabemos sobre el problema que están viviendo, sobre todas las injusticias que se le están suscitando a través del Gobierno. Nosotros somos los únicos que sabemos lo que están sufriendo cada uno de los presos políticos, por lo tanto, todas las familias estamos buscando la mejor manera para que nuestros familiares estén en libertad y si Margin firmó ese pronunciamiento, tiene el total apoyo de la familia, tiene todo el respaldo nuestro. Si en ese pronunciamiento se habla sobre la unificación de la familia nicaragüense, habrá que buscarse la forma, el método, el mecanismo para que eso suceda, pero tiene que haber libertad para nuestros familiares, libertad para los presos políticos. Eso es lo que nosotros queremos.

El tercero de derecha a izquierda es Miguel Mendoza, en la celebración del cumpleaños 90 de su madre. CORTESÍA.

¿Ese mecanismo puede ser una negociación con Daniel Ortega?

Nosotros quisiéramos que si hay un diálogo que haya un diálogo honesto, sincero, amplio, inclusivo. Es lo que nosotros queremos. Que no sea un diálogo entre ellos, entre el Gobierno y su aparato institucional. Queremos un diálogo entre la gente que realmente está sufriendo, y en este caso queremos la libertad de nuestros familiares. Tiene que haber un diálogo amplio. Quizás en el pronunciamiento no se es tan claro porque diálogo ahí no dice. Dice acercamiento, unificación de la familia. Y sí, llama a la Iglesia, y al Gobierno y a todas las fuerzas vivas del país para la unificación de las familias. Por eso yo decía, se está hablando de la unificación de las familias y se debe de buscar el método, la forma, de que esto sea posible, siempre que los reos de conciencia salgan en libertad, y si la Iglesia católica se pone al frente de esto, tiene el respaldo de toda la población. Lo que queremos es la libertad de nuestros familiares y se tiene que buscar la forma, el método de cómo es que se va a hacer, pero urge que nuestros familiares salgan de la cárcel.

Entre esas fuerzas vivas del país, ¿en quién confiarían para que encabece esa unificación y se consiga la libertad de los reos políticos?

Yo de manera personal pienso que cuando se habla de las fuerzas vivas, pienso en la Iglesia y pienso en la oposición. Pienso igual en el poder económico. Pienso en todas las fuerzas vivas que hay en el país. Por eso te decía que, si la Iglesia católica encabeza la acción, llámese como se llame, la actividad para el bien de la unificación de las familias, pues tiene nuestro apoyo y por supuesto los mejores deseos que llegue a un buen fin porque ya ha habido otros momentos de diálogo y realmente no ha habido un cien por ciento de cumplimiento sobre lo que se ha suscrito y sobre lo que la población espera.

LEA TAMBIÉN: Luis Fley: “La población está viendo a la violencia como el único medio para sacar a Daniel Ortega”

El Cosep mostró anuencia para un diálogo

Ellos podrían ser una parte del diálogo. Recordemos que aquí hay empresario prisioneros. Miguel Mendoza no es político, tampoco es empresario. Es un bloguero, es un periodista, sin embargo, está en las mismas condiciones como está José Adán Aguerri y como están todos. Si cada gremio que tiene algún amigo, familiar o directivo que está dentro de las cárceles injustamente igual como mi hermano que no es nada de político, ¡hombre!, aquí no es malo que ellos sean parte, sin embargo, lo único que pediría yo a los empresarios es que vayan a dialogar con toda la conciencia que debe llevar el caso. Es eso. Que no haya negociaciones por debajo de la mesa y que si se va a hablar de los reos políticos, que se hable de todos porque son 170 reos de conciencia los que hay.

¿Por qué cree usted que hay familiares que todavía no han firmado este pronunciamiento?

No se puede exigir cuando una familia no quiera. Ellos también han visto a sus familiares detenidos y seguramente han hablado del caso y es por ello que a lo mejor se sienten renuentes a firmar. Otros familiares, como por ejemplo el caso de Cristiana (Chamorro) y María Fernanda (Flores), ya se pusieron de acuerdo y ya son parte de este grupo que está solicitando la unificación de las familias, entonces no sabemos por qué su actitud, pero cada quien es dueño de su propio pensamiento. Yo lo que quiero, y la familia lo que queremos, es que mi hermano, Miguel Mendoza, quien no es empresario, ni político, que es periodista, lo que queremos es que salga en libertad y cualquier mecanismo, cualquier medio, cualquier situación que se presente para su libertad, nosotros estaremos ahí.

Hay quienes consideran que los presos políticos no deben ser utilizados como fichas de cambio

Estamos desesperados. Todas las familias de los reos de conciencia estamos desesperados y lo menos que queremos es que continúen ahí en la cárcel. La situación es difícil para nuestros familiares y solamente el que está preso, el que está dentro y las familias que estamos sufriendo y que queremos que nuestros familiares salgan de la cárcel somos realmente los que estamos viendo de qué manera pudiera ser su libertad. Nosotros quisiéramos que se dé una libertad total sin condiciones, eso quisiéramos nosotros, sin embargo, no sabemos cómo podría encaminarse esta actividad para la unificación de las familias y que nuestros presos políticos salgan de donde jamás debieron haber entrado.

Si los 170 familiares se llegaran a poner de acuerdo y todos firman el pronunciamiento, ¿cree usted que Daniel Ortega accedería a su petición?

Eso sí no sé. Es incierto. Más cuando miramos a los propagandistas del Gobierno diciendo una gran cantidad de cosas. Es incierto cómo el Gobierno pueda actuar.

Ramón Mendoza tiene 62 años y dice que, a su edad, su único sueño es ver libre a su hermano. Jeiner Huete/CORTESIA

Plano personal

Ramón Mendoza Urbina tiene 62 años. Es el sexto de una familia de once hermanos. Es hermano del preso político Miguel Mendoza.

En su juventud fue maestro. Trabajó en el sector salud y en organizaciones no gubernamentales. Actualmente está jubilado.

Estudió tres años de la carrera de Derecho y otros tres de Relaciones Internacionales, pero por “las cosas de la vida”, no pudo terminar ninguna, cuenta.

Dice que a su edad “ya no hay sueños para mí. El único sueño que tengo es ver libre a mi hermano Miguel”.

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí