El medio oficialista Viva Nicaragua informó, el sábado 5 de febrero, que el barco nicaragüense “General Augusto C. Sandino” llevaría a Cuba otro cargamento de 36 contenedores con alimentos y enseres básicos, como ayuda humanitaria al pueblo cubano. El buque llegaría al puerto de Cuba a mediados de la presente semana.
Pero en Cuba no ha ocurrido recientemente una catástrofe natural, un terremoto, ciclón, maremoto o algo parecido. Ni siquiera una gran sequía. Lo que pasa es que, por el sistema económico comunista, Cuba no es capaz de producir suficiente comida para alimentar al pueblo cubano.
El caso es digno de figurar en la columna de Ripley, “Aunque usted no lo crea”: El segundo país más pobre de las Américas, que es Nicaragua, tiene que donar alimentos y otras cosas de primera necesidad al “paraíso comunista” de Cuba. Cabe señalar que el índice de pobreza en ese país no se conoce porque el régimen comunista no informa sobre tal cosa. Pero la miseria en que se encuentra se puede deducir del hecho de que necesita recibir comida gratuita de la empobrecida Nicaragua.
Antes de la revolución de 1959, Cuba producía comida suficiente para todos los cubanos y hasta para exportar. En algunos rubros, como el azúcar, ocupaba el primer lugar en el mundo. Pero todo se vino abajo desde que fue impuesto el régimen comunista.
La justificación que dan los gobernantes de Cuba de la gran lipidia que sufre la población es lo que llaman “bloqueo económico imperialista”. Pero lo que hay ni siquiera llega a ser un embargo comercial efectivo.
La verdad es que, según las cifras oficiales, Estados Unidos (EE. UU.) es el quinto socio comercial de Cuba. El país gringo vende a Cuba alrededor del 96 por ciento del arroz y el 70 por ciento de los productos de carne avícola que se consumen en la Isla. También le exporta a gran escala trigo, maíz, soya y sus derivados.
Desde el año 2000 hasta septiembre del 2021, EE. UU. vendió alimentos a Cuba por valor de 8,582 millones de dólares. A lo cual hay que agregar el valor de las ventas de medicinas y muchos otros bienes de consumo.
Entonces, ¿de qué bloqueo yanqui hablan las autoridades comunistas de Cuba? Como ya dijimos, no hay ni siquiera un embargo comercial de significación. Lo del bloqueo es un recurso propagandístico para movilizar a los comunistas y demás revolucionarios del mundo contra EE. UU., engañar a los cubanos de la Isla y no reconocer el fracaso del comunismo.
El imperio ruso, China y Vietnam renunciaron a la economía comunista y crearon un capitalismo de Estado que les ha dado buenos resultados. Mantienen sometidos a sus pueblos con el régimen político totalitario, propio del comunismo, pero al menos los han sacado de la extrema miseria como la que sufren los cubanos de la Isla. Salvo, por supuesto, los que detentan el poder, y sus allegados, que en medio de la extrema pobreza del pueblo se permiten toda clase de lujos y se dan la gran vida.