Román González ha pasado fuera de su casa los últimos cuatro meses, dedicándose completamente al campamento que dio como resultado su espectacular presentación la noche del sábado contra Rey Martínez. No obstante, Chocolatito está en este momento cansado de tanto trabajo, tanto desgaste, despertarse por la mañana, correr 10 kilómetros, no poder comer lo que se le antoje y sobre todo por no poder ver a su familia, especialmente a sus hijos.
Los planes de Román primero pasan por unas merecidas vacaciones, olvidarse por algunas semanas del boxeo, desconectar la mente y disfrutar de los 750 mil dólares que se embolsó para esta pelea. Posteriormente, ya vendrán las siguientes negociaciones, de las cuales la principal será con Juan Francisco Estrada. En la conferencia de prensa post pelea, Chocolatito admitió que tiene especialmente interés en la trilogía con Estrada por que le representa más dinero, aunque más adelante agregó que estaría dispuesto a pelear contra cualquiera “con tal que paguen bien”.
Te puede interesar: Carlos Blandón, apoderado de Román González, insulta al editor de deportes de LA PRENSA y agrede a otro periodista
Sobre el tiempo que le queda boxeando, González fue claro: “Dependerá de la situación. Si hay buenas negociaciones habrá unas cuantas peleas más, si van mal prefiero quedarme con mis hijos, ya Dios me ha regalado mucho. Es que siendo sinceros, cuando hay dinero te motiva”. González no piensa subir a las 118 libras, siente que no es necesario. “No tengo pensado subir de categoría ni tampoco enfrentar a (Naoya) Inoue, es un buen muchacho”.
Finalmente, en relación al combate contra Martínez, el nicaragüense le dio mérito al mexicano. “Di todo lo que tenía y Rey Martínez demostró que es muy valiente y aguanta mucho, demostró sus cualidades que tiene y el tipo de campeón que es. Lo importante es que hicimos un buen trabajo. Veníamos minándolo poco a poco. Es un muchacho que pega y tiene lo suyo, muy fuerte y sobre todo aguanta, felicidades porque hicimos un buen trabajo. Solamente lo vi ganar un asalto”, señaló González, quien admitió que la esquina lo mandó a no tomar riesgos por la mano izquierda de Martínez en el octavo y noveno asalto cuando parecía tenerlo casi noqueado. “Tiene volados fuertes que si me hubiera agarrado me manda a la lona, la mayoría de veces tuve las manos arriba por eso”, concluyó Chocolatito.