De la calle El Triunfo a la Carretera Norte: los edificios de LA PRENSA

La historia del Diario LA PRENSA inicia un martes 2 de marzo de 1926 con su primera edición por un valor de tres centavos de córdoba. Se imprimía en un sencillo galerón de la calle El Triunfo en Managua. En la esquina estaba una pequeña casa de taquezal con dos puertas, una sala, un patio trasero entechado donde funcionaba el taller que registraba lo que pasaba en esa Nicaragua provinciana e informaba a los nicaragüenses de los que sucedía en el resto del mundo.

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Fue fundado por Gabry Rivas, Enrique Belli y Pedro Belli con un capital de cinco mil córdobas, que era el costo de la maquinaria en la que se imprimían los periódicos, de acuerdo con las memorias de este Diario.

En los siguientes cuatro años, sus propietarios vendieron las acciones y en 1932 fueron adquiridas en su totalidad por Pedro Joaquín Chamorro Zelaya. Por casi un siglo LA PRENSA sigue estando en la familia Chamorro.

Cuando Agustín Fuentes Sequeira llegó a la sala de redacción del Diario era un muchacho de veinte años. Fue en 1948 que inició con LA PRENSA un vínculo laboral que duraría 23 años. A sus 93 años cumplido está considerado como el periodista vivo más antiguo de Nicaragua y comparte sus memorias.

Recuerda que el Diario se hacía en una “casita de un piso” que tenía una sala de redacción de 5×5, con cinco redactores que escribían con lápiz y papel en una mesa rústica y luego las notas las pasaban a un corrector que tecleaba a dos dedos en una máquina de escribir. Entre sonrisas confiesa que al inicio el corrector se quejaba de su letra, pero fue mejorando con el tiempo.

Fuentes dice que, a su llegada el tiraje de LA PRENSA era de tres mil ejemplares, pero cuando se retiró del Diario superaba los 60 mil. Considera que el éxito del periódico se debió a “las ideas frescas” que incorporó Pedro Joaquín Chamorro Cardenal a su regreso de México. “Nos llevaba en su carro a recorrer los barrios apartados de Managua para buscar noticias y así el Diario llegó al primer lugar”, dice.

Para Fuentes, hablar del Diario LA PRENSA le trae nostalgia porque está convencido que este periódico forma parte de la historia de Nicaragua.

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En los 46 años que el Diario LA PRENSA estuvo ubicado en la calle de El Triunfo sufrió dos terremotos, el de 1931 y 1972. Pero la naturaleza no ha sido la única empeñada en exterminar las edificaciones de “el diario de los nicaragüenses”.

Jaime Chamorro Cardenal recordó en una entrevista de 2019, que el 10 de enero de 1944 el Diario fue cerrado por un año y diez meses por la dictadura somocista y cuando se movió a carretera Norte en 1973, fue bombardeado en su totalidad por Somoza, el 11 de junio de 1979.

“LA PRENSA se volvió una tradición en Nicaragua. La historia de LA PRENSA es la historia de Nicaragua del siglo XX”, señaló Chamorro Cardenal, en una entrevista publicada en marzo de 2021, cuando este diario cumplió 95 años.Y ese día con optimismo reafirmó que “LA PRENSA llegará a 100 años”.

Última ubicación

El periódico LA PRENSA funcionó desde 1973 en el plantel industrial ubicado en el kilómetro cuatro y medio de la carretera Norte de la capital tras los destrozos de sus antiguas edificaciones en la calle El Triunfo por el terremoto de 1972.

En los últimos 49 años, este edificio ha sido escenario de bombardeos, ataques, censuras, cierres parciales y totales por somocistas y sandinistas.

“Con el seguro del edificio de El Triunfo se compró el terreno de carretera Norte”, recuerda una de las familiares consultadas por Revista Domingo. “Nacimos con LA PRENSA, crecimos viendo el Diario en nuestro entorno… Todo lo que ha pasado con y en LA PRENSA ha afectado directamente a todos los integrantes la familia: los cierres, incendios, censuras, tomas, todo nos involucra”, sentencia.

Agustín Fuentes Sequeira recordó que la rotativa Goss Urbanite, logró salvarse del segundo terremoto y el Diario fue trasladado a esa zona industrial de la zona norte de Managua. “En el terreno solo había una caseta”, señala.

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Una vez más este rotativo surgió de las cenizas.

En marzo de 1973, después de 69 días de cierre, se publicó la primera edición desde las nuevas instalaciones del kilómetro cuatro y medio de Carretera Norte. Una de las voces que celebró el regreso de LA PRENSA fue el poeta José Coronel Urtecho.

“Felicitaciones por reaparición de LA PRENSA; para la conciencia del país, cuando LA PRENSA deja de salir es como que no sucediera nada, o todo fuera mentira”, envió en un telegrama el intelectual.

Sin embargo, el 23 de agosto de 2022,Rosario Murillo, anució ante medios oficialista que en la propiedad que legalmente pertenece desde hace 49 años a Editorial LA PRENSA, se instaló el Centro Cultural y Politécnico José Coronel Urtecho, bajo la dirección del Instituto Nacional Tecnológico (Inatec).

“Nos sorprende el descaro que estén usando el nombre del poeta Coronel Urtecho, gran amigo de la familia y asiduo lector de LA PRENSA, pero finalmente están oficializando el robo”, dijo otra miembro de la familia Chamorro que habló bajo el anonimato y hace una pausa en su relato para aclarar que “LA PRENSA no es de una familia, LA PRENSA es de Nicaragua”.

El valor de los bienes confiscados totaliza los 9.68 millones de dólares, según publicó este rotativo con base a una evaluación realizada en febrero de 2021.

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“Después del día que mataron a Pedro Joaquín, el viernes 13 (de 2021) fue el segundo día negro, un día lleno de zozobra, indignación y frustración. La diferencia con el primero es que ese día pudimos expresar nuestro dolor, ahora ni eso”, se lamenta otra miembro de la familia Chamorro.

Confiesa que el despojo del edificio le ha llenado de rabia e indignación, pero se conforta con saber que en 96 años LA PRENSA ha salido fortalecida desde los escombros y apuesta que ahora no será diferente. “Estamos en el aire y vamos por 100 años y más”, concluye.