Después de arrebatarle los dos títulos de los pesos medianos en 2018 a Gennady Golovkin hace cuatro años, Canelo Álvarez se convirtió en monarca de las 168 libras de la Asociación Mundial de Boxeo con 28 años, luego unificó tres títulos en las 160 libras contra el complicado Daniel Jacobs, se dio el “lujo” de destrozar a Sergey Kovalev en las 175 libras, haciéndose dueño del cetro de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y, luego, arrebatarles uno a uno los títulos a Callum Smith, Billy Joe Sanders y Caleb Plant, para convertirse en monarca unificado de las 168 libras. Hasta ser detenido cuando intentaba conquistar nuevamente las 175 libras por Dimitri Bivol.
Gennady Golovkin, quién tenía 36 años en 2018 cuando perdió entre polémicas contra Canelo, tan solo hizo cuatro peleas. En una de ellas contra Sergiy Derevyanchenko recuperó dos títulos de las 160 libras y en la última sumó otro más contra el japonés Ryota Murata. Ahora tiene 40 años y se ha visto más lento en sus reacciones ofensivas y defensivas, aunque mantiene su mano izquierda en jab que parece una bomba le han faltado el respeto. Recientemente el japonés no solo se fajó en el centro del ring, sino que lo hizo retroceder ¿Podrían ustedes creer que alguien con la ferocidad y fortaleza física de Golovkin se echaría hacia atrás? El peso de los años no lo han perdonado. Mientras Canelo ha incrementado su poder, cerrado su defensa y ha dado chispazos de coraje en los intercambios, que es lo que le faltaba, Golovkin retrocedía.
Soy de los que piensa que Canelo no solo ganará este combate, sino que lo hará por la vía del nocaut. El Canelo de 2018 tenía como referencia de hombre más grande enfrente a Golovkin, pero luego aprendió a conocer su cuerpo y jugar con 160, 168 y 175, supo aguantar el golpeo de tipos muchos más fuerte que él, lo que indica que le soportará la pegada a Golovkin y tomará más riesgos por su mejoría en la asimilación de golpes. Pero Golovkin, fue incapaz de ganar con claridad hace cuatro y cinco años sus dos oportunidades contra el mexicano y, aunque ustedes digan que le robaron esas dos peleas, no fue totalmente superior cuando pasaba el mejor momento de su carrera, y ahora soltará su última bala.
Nadie puede contra la ley de la vida, y tampoco el kazajo tiene cara de ser un George Foreman sorprendiendo a Michael Moore.