Como “una vergüenza de país” calificó el presidente de la organización indígena miskita de Honduras Masta, Norwin Goff, el hecho de que una comisión de miskitos de Yatama haya tenido que viajar a Honduras para denunciar ante la relatora especial para los Pueblos Indígenas de las Naciones Unidas, Victoria-Tuali-Copuz, la problemática que enfrentan por la invasión a sus territorios y la represión del régimen del presidente inconstitucional Daniel Ortega.
“El Gobierno de Nicaragua habla sobre bienestar social, de cristianismo y todo eso, pero a los indígenas los tienen marginados, los están militarizando, los están asesinando y eso para nosotros es una vergüenza que debería darle al país de Nicaragua”, sostuvo Goff.
“Si usted viene a las fronteras de Nicaragua, a las comunidades de Sují, Francia, (y) ve niños que tienen diarrea, desnutridos, con temor, eso no se puede comparar con cualquier situación social que puede pasar”, expresó Goff, quien dijo que no cuentan con la cantidad exacta de desplazados, pues la noche del miércoles había ingresado mayor cantidad de familias.
EXPOSICIÓN EN 40 MINUTOS
La organización de Goff fue la que gestionó una audiencia especial entre la relatora especial y los miembros de la comisión nicaragüense, que duró unos cuarenta minutos, durante los cuales pudieron explicar lo que sucede en La Moskitia nicaragüense.
Goff consideró que hubo receptividad de la relatora especial a la situación planteada por los miskitos nicaragüenses. “Ella va muy preocupada por los hechos que están pasando en Nicaragua”, manifestó Goff, quien señaló que el gobierno de Daniel Ortega, “tiene que crear una política urgente para poder dar derecho a los pueblos indígenas de Nicaragua”, pues debe reconocer “los derechos que tienen los pueblos indígenas sobre sus recursos naturales y sus territorios”.
Masta había recibido la promesa de Acnur (Agencia de la ONU para los refugiados) de que muy pronto acudirán a La Moskitia hondureña para facilitar alimentos y medicinas a los miskitos nicas.
DIPUTADA DEL PLI REPUDIA ACTITUD DE ORTEGA
En la Comisión de Pueblos Originarios (en la Asamblea Nacional) no todos sus diputados cuestionan a Ortega al no permitir el ingreso al país de la relatora especial de Naciones Unidas para conocer la situación de penurias y violencia que sufre la población del Caribe Norte.
La que repudió este hecho fue la diputada del Partido Liberal Independiente (PLI) por la Región Autónoma del Caribe Norte, Corina Leiva.
“Lamento el caso, hemos dicho en varias ocasiones que el Gobierno esconde la verdad y no permite que entre esa comisión (de Naciones Unidas) para evitar que (se) pueda dar a conocer la verdad a otros países”, expresó Leiva.
Entre la situación, que a su criterio pretende ocultar el Gobierno, es que en las comunidades del Caribe Norte, sobre todo en Waspam, “la gente está muriendo, están matándose entre colonos, indígenas, miskitos, mayagnas” por conflictos de tierra.
Leiva afirmó que la semana pasada que representantes de la Comisión Ecuménica Pastoral de Derechos Humanos de Waspam expusieron a la bancada del PLI “que ya hay más de cincuenta muertos” debido al enfrentamiento entre indígenas por la invasión de colonos en los territorios.
“Están muriendo por conflictos, pero también de hambre, de enfermedades, de un desamparo total que sufren gracias al Gobierno que tenemos en Nicaragua”, denunció Leiva.