Marianela Lacayo
Asesora de imagen
hacer ejercicio físico para mejorar la salud y la proyección física es algo obligatorio. Cuando vas al gimnasio o realizás ejercicio al aire libre, debés mantener un código de vestimenta acorde a la actividad, lugar, clima y necesidades del momento.
El ejercicio precisa de un vestuario cómodo y con telas adecuadas para facilitar que el cuerpo se mueva y transpire correctamente, además de hacernos ver bien. Por esta razón no es recomendable usar prendas totalmente de algodón que, aunque absorben el sudor, no permite que se evapore. La tela se humedece en zonas como axilas, espalda, nalgas, ingles, entre otras áreas que no lucen bien cuando hay sudor.
La ropa puede ser ajustada, pero sin causar problemas al cuerpo, como dificultades en la circulación. Debés asegurarte de que las telas estiren y no aprieten hasta el punto de hacer daño.
El sujetador debe ser especial para las actividades, ya que al hacer ejercicio se realizan movimientos que con un sostén común terminarían causando lesiones.
Usar las zapatillas inadecuadas puede provocar lesiones en pies, piernas, rodillas y espalda. Al adquirir el calzado asegurate de que el modelo sea para la actividad deportiva que desempeñás.
Maquillarse para ir al gimnasio no es la mejor opción, aunque nuestro semblante lo necesite. Los poros se tapan con el maquillaje y al sudar no “respiran” adecuadamente, lo que provoca impurezas, suciedad, acumulación de grasa, y resultan en alergias y brotes. Asegurate de usar toallitas o productos desmaquillantes antes de empezar la rutina.
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