Los delitos violentos y la violencia política desmejoraron el índice de paz de Nicaragua, que pasó de la posición 58 en 2014, a la categoría 74, según el Índice de Paz Global (IPG) 2015, que lo coloca como un Estado de paz medio.
No obstante, con respecto a Centroamérica y El Caribe aparece en tercer lugar después de Costa Rica y Panamá. Costa Rica aparece como Estado más pacífico en la región, en el puesto 34. El costo de la contención de la violencia en Nicaragua es estimado en 1,640 millones de dólares o 270 dólares por persona.
En el caso de Nicaragua se destaca que empeoró la violencia política y los crímenes violentos. El puntaje para la evaluación utilizada es del 1 al 5.
¿QUIÉN LO REALIZA?
El índice es realizado por el Instituto de Economía y Paz (IEP), fundado por el empresario y filántropo australiano Steve Killelea. El mismo mide el estado de paz en 162 países, según 23 indicadores, los cuales miden la ausencia de violencia o el miedo a la violencia. El Índice 2014 ubicó a Nicaragua como el sexto país más seguro de Latinoamérica y el Caribe al ubicarlo en la posición 58.
El Índice de Paz Mundial es la única medida estadística de su clase y permite entender y analizar qué es lo que hace que las sociedades sean pacíficas y qué se debería hacer para mitigar la violencia del futuro.
Los indicadores pueden ser agrupados en tres temas generales: el nivel de seguridad y protección de una sociedad, el número de conflictos internacionales y domésticos y el grado de militarización, explica el informe, que elabora desde 2008 el IEP.
El índice sirve como referencia para los empresarios que de esta manera pueden tomar en cuenta la seguridad en un país, la relación de ese país con sus vecinos y el bienestar de los ciudadanos de cada país.
INDICADORES MÁS ALTOS
Entre los indicadores más altos que destacan en Nicaragua están la criminalidad percibida en la sociedad, con una puntuación de 3 de una evaluación cualitativa y en este caso la fuente fue la Unidad de Inteligencia de The Economist.
Igualmente los homicidios, con una calificación de 4 y la fuente utilizada fue la encuesta sobre tendencias delictivas y funcionamientos de los sistemas de justicia penal de las Naciones Unidas.
Así como los crímenes violentos, con una evaluación de 3, el acceso a las armas pequeñas y ligeras, también obtuvo un puntaje de 4, según la evaluación cualitativa de la accesibilidad de las armas pequeñas y ligeras, y la fuente fue la Unidad de Inteligencia de The Economist.
Otros indicadores fueron: el terror político, con una escala de 3, según el nivel de terror descrito en el año anterior por Amnistía Internacional y los informes nacionales del Departamento de Estado de Estados Unidos; también las manifestaciones violentas que contó con una evaluación cualitativa de 3, sobre la probabilidad de manifestaciones violentas en un país y la fuente es la Unidad de Inteligencia de The Economist.
El estudio que coloca este año como país más pacífico del mundo a Islandia refiere que América Central y el Caribe se sitúan por debajo de la media global de este ranking, sobre todo en términos de las tasas de homicidios y delitos violentos, así como en percepciones de criminalidad.
En la región centroamericana y el Caribe figura como país más violento El Salvador, en el número 123. Mientras que Guatemala aparece en la posición 118, Honduras ocupa el puesto 116. Y menciona el caso del llamado Triángulo Norte en Centroamérica (Guatemala, El Salvador y Honduras), donde destaca principalmente la violencia de las pandillas urbanas, así como la delincuencia relacionada con las drogas.
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