El nivel de vulnerabilidad al que Managua está expuesto en la época lluviosa le preocupa a las autoridades de la Alcaldía, al punto que diseñaron una ambiciosa Estrategia de Intervención, la que demanda apoyo técnico y una inyección presupuestaria amplia de actores externos. Mientras tanto, propusieron con urgencia una modificación a su Presupuesto de Ingresos y Egresos 2015, para destinar recursos que respalden la ejecución de 274 obras menores de protección y mitigación de la ciudad, luego de quedar desgarrada con los últimos aguaceros.
Los cálculos de la municipalidad es que este paquete de proyectos que suman 110 millones de córdobas —de los cuales la mayoría los proveerá el Gobierno central—, estén culminados en los próximos treinta días. Para asegurarlo, este martes se envió la propuesta de reforma a la comisión de Finanzas, Presupuesto e Infraestructura, de la comuna, para su debido análisis y posterior presentación ante el Concejo.
Debido a que ayer fue la sesión ordinaria que corresponde al mes de junio, se estaría discutiendo la aprobación del incremento presupuestario en los próximos días, en una sesión extraordinaria.
El techo pasaría de 4,255 millones de córdobas a 4,399 millones, puesto que se pretenden autorizar 143 millones de córdobas, los cuales 110 millones van para las emergencias y el resto para otros gastos.
ESTUDIO DE LA COOPERACIÓN JAPONESA EN 18 MESES
En una visita a los concejales en plena sesión, Fidel Moreno, secretario general de la Alcaldía, explicó que el producto final del estudio que desarrollará la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) sobre planificación territorial tiene que estar finalizado en 18 meses. Este iniciará en 2016 y será costeado por Japón.
La investigación también abarcará el desarrollo de las vías y el transporte.
Por otro lado, informó que se busca concretar un proyecto con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para mejorar la ineficiente red de cauces, que aparecen en el Plan de Acción Managua Sostenible, elaborado por la misma entidad financiera.
En el aspecto de obras de protección, la administración municipal se fijó construir obras en la parte alta de la ciudad para disminuir la vulnerabilidad. Se tienen que poner barreras vivas, cubos de infiltración y cortinas rompe viento. A mediano y largo plazo se lograría, según Moreno, que no se degrade ambientalmente la zona alta de la Subcuenca III.
Otro tema es la construcción de micropresas. Según un mapa presentado por el funcionario serían ocho micropresas, de las cuales cinco serían las más necesitadas (Américas Cuatro, cauce El Borbollón, barrio Haleah, La Maravilla y por la Kola Shaler). Cada una de estas costaría entre 40 y 65 millones de córdobas, dependiendo de la capacidad de retención de agua.
Por último, se implementaría educación ambiental que incorpore el buen manejo de los desechos sólidos, la conservación de suelo y jornadas para crear conciencia en las personas sobre el mal de tirar basura en la calle y sistemas de drenajes.
“Se requieren enormes inversiones, pero además cambiar nuestros hábitos, adquirir una cultura ambiental distinta, repensar el desarrollo de la ciudad”, agregó Moreno.
194 familias que habitaban en diferentes partes de la capital fueron evacuadas por la Alcaldía de Managua, después de las últimas precipitaciones. Solo en el barrio Rubén Darío se trasladaron 37 núcleos familiares.
El caos de Ciudad San Sebastián
Fidel Moreno, secretario general de la Alcaldía de Managua, se refirió al problema de inundación que enfrentan familias que habitan en Ciudad San Sebastián, ubicado cerca de Las Jaguitas. Para el funcionario es justo el reclamo que mantienen los afectados con los urbanizadores, pero no dijo si la comuna tomará parte para buscar una solución.
Moreno, quien dijo que la primera etapa de Ciudad San Sebastián inició hace 15 años y la segunda hace aproximadamente diez años, no aclaró si los desarrolladores cumplieron con los requisitos para construir. Tampoco el por qué se dio aval de la municipalidad si la zona donde está ubicada no es favorable por la naturaleza de las escorrentías.
Los afectados dijeron a LA PRENSA que, según los responsables de la urbanizadora, han intentado reunirse con Moreno, pero que no han sido recibidos. Se desconocen las acciones a tomar.
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