Tres días después de los incidentes violentos contra manifestantes en las cercanías del Consejo Supremo Electoral (CSE), la Policía emitió una nota de prensa y presentó imágenes, para responsabilizar a los protestantes de iniciar los actos violentos.
Según la nota leída por la comisionada mayor Magdalena Fonseca, todo transcurría normal “hasta que un grupo de manifestantes destruyeron las vallas metálicas de contención y haciendo uso de los tubos de hierro se lanzaron a agredir a hombres y mujeres policías”.
Seis agentes resultaron lesionados, dice la Policía.
Fonseca se limitó a leer la nota de prensa, los periodistas se quedaron con las inquietudes como: ¿por qué la Policía impidió el derecho a la protesta y a la movilización?, así como a la agresión y detención a periodistas mientras ejercían su labor o desconocimiento de inmunidad de diputados.