Al menos siete de los 14 policías del listado presentado el viernes por la Fiscalía, por haber integrado el operativo que perpetró la masacre el 11 de julio en Las Jagüitas, son de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional, conocidos como “Tapir” y por tanto con algún nivel de especialidad.
La autoridades policiales han dicho que se trataba de un operativo antidrogas, sin embargo, los oficiales de más alto rango que lideraban el operativo no son de esa especialidad, sino “Tapir”, incongruencia que nadie ha aclarado aún.
Esos siete agentes habían cumplido sus cursos de convalidación establecidos para ascenso este año. Esto lo confirma una circular remitida por el director de la Academia Walter Mendoza, comisionado general Cairo Guevara, a las diferentes delegaciones policiales del país.
La circular en poder de LA PRENSA consta de 145 páginas y especifica los cursos en los que han participado una cantidad determinada de oficiales, a quienes les convalidarán cursos recibidos entre 2012 y 2015. Así como la carga horaria requerida para que puedan ascender en el grado inmediato superior.
Los siete policías corresponden a un mismo curso impartido en los años 2012 y 2013, e indica que estaban en línea de espera para ser contemplados en una posible propuesta de ascensos por la jefatura para este año.
ASIGNADOS A LA DOEP
Se trata del curso básico de Intervención Táctica, esto indica que estos oficiales están asignados a la Dirección de Operaciones Especiales Policiales (DOEP), dirigida por el ahora comisionado general Justo Pastor Urbina, quien se dice goza de mucha confianza del presidente inconstitucional, Daniel Ortega.
En ese listado están el capitán Zacarías Ignacio Salgado, quien además de haber participado en 2012 en las 832 horas del curso de francotirador, participó en 2013 en el curso de Intervención Táctica. Él era el líder del operativo por ser el oficial de más alto rango y no pertenece a la Dirección Antidrogas..
El resto de policías que aparecen en el listado de la circular son los cuatro tenientes mencionados por la fiscal general de la República, Ana Julia Guido: Jairo Antonio Aguilar Hernández, Jonny Henry Palacios Jiménez, Oscar José Cargas Rugama y José Alejandro Fonseca Salmerón.
Los otros son el suboficial mayor Javier Alejandro Saldaña Torres y el suboficial Ernesto Alexander Urbina López. Los oficiales de la DOEP o “Tapir” eran los de más alto rango del grupo.
COINCIDE CON TESTIGOS
El 14 de julio LA PRENSA publicó versiones de los testigos de la masacre que coinciden en que la mayoría de los policías que participaron en el operativo policial del 11 de julio —en el que dispararon contra el carro blanco conducido por Milton Reyes y que costó la vida a tres personas de esa familia—, vestían uniforme azul oscuro, similar al que utilizan las fuerzas especiales, pasamontañas y portaban fusiles.
En esa ocasión Jerson José Orón Cajina, de 25 años, uno de los vecinos y quien aseguró que también fue entrevistado por oficiales de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), sostuvo que la familia fue atacada en tres puntos diferentes donde se distribuyeron los policías e hicieron unos 46 disparos a lo largo del camino que está en pésimas condiciones. Las detonaciones que escucharon fueron en ráfaga.
A causa de los disparos murieron Katherine Ramírez, de 22 años y los niños Efraín Ramírez, de 11 años y Aura María Reyes Ramírez, de 12 y con heridas graves resultaron Myriam Natasha Guzmán Ramírez y Axel Reyes, de 5 y 13 años, respectivamente.
En el discurso del acto central el 19 de julio, el presidente inconstitucional, Daniel Ortega, se limitó a llamar a la Policía Nacional a “revisar muy bien los operativos que se realicen en contra del narcotráfico y el crimen organizado, para que no se vuelvan a presentar hechos dolorosos como los que se presentaron en estos días”.
NIÑA SOMETIDA A OTRA OPERACIÓN
En una conferencia de prensa a la que solo asistieron medios oficialistas, funcionarios del Hospital Manuel de Jesús Rivera “La Mascota”, afirmaron que los especialistas garantizan las condiciones para que la niña Myriam Natasha Reyes Ramírez, de 5 años, fuera sometida ayer a una intervención quirúrgica.
La niña sufrió lesiones graves a causa de los impactos causados por las balas disparadas por los policías en Las Jagüitas.
Según el doctor Félix Sánchez, la operación a la que fue sometida la sobreviviente tenía como propósito revisar si existía o no alguna complicación posterior a otra cirugía que le practicaron un día después de que fue internada en ese centro asistencial.
El doctor Gerardo Mejía, especialista de ese centro asistencial, refirió que ellos están en función de garantizar “que la niña salga del hospital con vida, en las mejores condiciones posibles”.
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