Un análisis de consumo, aplicando la tarifa de alumbrado público de Disnorte-Dissur para estadios y plazas, demuestra que las estructuras metálicas bautizadas como “árboles de la vida”, que se encienden cuatro horas diariamente, gastan anualmente 1.1 millones de dólares en energía, explicó el ingeniero eléctrico Fernando Bárcenas Molina.
Y aunque los nuevos “arbolatas” que están en proceso de instalación, que son de variados colores y de menores dimensiones, utilizan menos bombillos y son de tecnología Led, el costo no va a disminuir si aumenta el número de estructuras metálicas cada año.
Se estima que alguna institución estatal o municipal ha invertido hasta ahora más de 3.3 millones de dólares en las construcción e instalación de los 134 “arbolatas”, aunque dicha inversión no aparece en el presupuesto de la Alcaldía de Managua y los costos de instalación de dichas estructuras se manejan discrecionalmente.
“Si los árboles se reemplazan va a haber una disminución en la factura eléctrica, pero es ilógico que los van a desplazar todos, porque sería tirar a la basura la inversión, si lo instaló en el 2014 y los va a quitar en el 2015, sería tirar dos millones de dólares y no creo que lo haga el Gobierno”, agregó Bárcenas.
NUEVOS ÁRBOLES
Los nuevos “arbolatas” que se comenzaron a construir son de 13 metros de ancho y 17 metros de alto y tienen 15,000 bombillos de 0.37 vatios, es decir, que cada árbol consume 22.2 kilovatios hora por día, mientras que los primeros árboles están consumiendo 136 kilovatios hora por día.
Las nuevas luces que tienen las últimas estructuras metálicas no son pintadas, como las que se colocaron en un comienzo, y tienen una textura diferente.
Aunque se desconoce cuánto destina el Gobierno en mantenimiento de los “arbolatas” con las luces ahorrativas, el costo por mantenimiento va a disminuir, pues estas luces tienen una vida útil de entre cuatro y seis años.
ÁRBOLES CERCA DE FALLAS
Enatrel ensambla y monta los “arbolatas” en sus propios talleres por órdenes directas de Rosario Murillo, coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía.
En coordinación con la Alcaldía de Managua, Enatrel inspecciona los espacios donde caben las estructuras y fiscalizan la topografía del terreno.
Sin embargo para el ingeniero eléctrico Fernando Bárcenas Molina, dichos “árboles” son un peligro porque han sido instalados cerca de fallas como la de Tiscapa, que ocasionó el terremoto de 1972 y la falla del Estadio, que provocó el terremoto del 1931.
