14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Anarquía en las redes sociales

Circula un mensaje posteado en el laberinto visual de la pantalla en el cual por la vía del Facebook una periodista salvadoreña llamada Magda Lanuza, transcribe un artículo titulado Del odio a la locura, cuyo autor —según ella— es Joaquín Absalón Pastora. La adjudicación absolutamente falsa es el producto de la asiduidad patológica que aparece en las redes sociales, tan susceptibles de extenderse en el mundo receptor. Cualquier remitente es capaz de enviar el infundio en las diversas formas: la mentira, la calumnia, la usurpación del apelativo y de los conceptos sin que el destinatario tenga la posibilidad de señalar al culpable. Recurrente es el expediente de ocultar al verdadero autor mal intencionadamente, por la vía de la confusión o de algún pernicioso equívoco.

Valga la oportunidad que me da la falsa imputación para refutar tanto la terminología como el contenido que hay en el artículo cuyos párrafos defienden, justifican todo lo que ha hecho el sandinismo en el trayecto que tiene de estar en el poder, razón por la cual el verdadero autor es un frentista que no tuvo el coraje de poner su nombre. Según el esotérico artífice del artículo, “los demonios saltaron de sus escondites y de sus cuevas alimentadas el 19 de abril de 2018”.

A partir de ahí nació una Nicaragua distinta de la que se había estacionado antes, llena de una pesadumbre resignada. Bastó una sola motivación para que se produjera una erupción que estalló en lo que fue interpretado como un fenómeno que ninguna relación tuvo con los demonios. “El hilo se rompe por lo más delgado”, es una expresión popular que cupo en la publicación de un decreto unilateralmente suscrito por el Ejecutivo. El decreto establecía restricciones que perjudicaban económicamente a los jubilados. Como ya es del conocimiento público, la protesta enquistada en el temperamento joven fue objeto de una represión desmedida. Suelta más bien estuvo la sensibilidad de los nietos ante la restricción contra los abuelos. Pero ahora el culpable es Satanás, cuya causa y origen no especifica, el mismo que resultó ser el invasor con impunidad para exterminar. Dice la declaración que hay que “estar falto de razón y de lógica para pensar que los sandinistas son quienes han destruido al país”. Falta espacio para cumplir con los requisitos de la investigación histórica. La lógica indica que no todo es malo y no todo es bueno. Durante la administración de diferente color ideológico y pragmatismo administrativo cabe reconocer que en los diferentes períodos se han cometido aciertos y desaciertos. Son muchos los factores en una sociedad polarizada. La realidad es que Nicaragua merece ser beneficiaria de una superior prosperidad social y económica.

El autor es periodista.

Opinión Noticias falsas Redes Sociales
×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí