Hace tres años Meyling Moreno y Aracely Vélez decidieron poner fin a sus vidas como asalariadas. Lo hicieron para ir detrás de un sueño que tenían en común y que se incubó cuando una de ellas estaba en la universidad: construir una empresa dedicada a la venta de café gourmet.
Y aunque no tenían el capital semilla para arrancar el negocio, el hecho de contar con la materia prima (el café) en abundancia, fue suficiente para que ambas emprendieran el camino hacia el éxito. Meyling creció entre los cafetales de San Juan del Río Coco, Madriz, donde se cultiva café de alta calidad.
Meyling cuenta que casi toda su vida ha visto a sus padres exportar el café sin valor agregado y por eso, cuando se trasladó a Managua a estudiar arquitectura, notó que la demanda de café gourmet procesado tenía un amplio y seguro nicho de mercado.
“Cuando estaba en la universidad, en los últimos dos años de la carrera, decidí comenzar a vender café entre mis compañeros y amigos, en una presentación típica, en bolsa plástica de polipropileno”, relata.
Meyling compartió su idea inicial de querer exportar café con valor agregado con Aracely, la que tenía experiencia en el mundo de los negocios. Ambas, que se conocieron cuando una de ellas visitó la empresa de la otra, se reunieron un día donde tras diseñar la ruta para echar andar la idea de negocio, decidieron “empezar a hacer algo diferente”.
Fue en 2013 cuando decidieron fundar oficialmente la empresa Green & Coffee y la marca Café del Bosque, que se debe al nombre de la finca en San Juan del Río Coco. Desde entonces comenzaron a participar en ferias nacionales e internacionales. Meyling ocupa el cargo de presidenta y gerente general de la empresa y Aracely como tesorera y directora de arte y comunicación de la empresa.
“La intención ha sido ofrecer un café gourmet, o calidad SHG que significa Grano Estrictamente de Altura, que son los granos de mejor calidad, que usualmente son vendidos en el exterior. Además es un café orgánico y certificado por OCIA International. El empaque es hecho a mano con material Kraft biodegradable, reciclado, con una imagen de portada de la pintura de Mario Montenegro Mujeres del Bosque ”, explica por su parte Aracely.
Además optaron por participar en programas de capacitación que brinda TechnoServe, donde aprendieron sobre cómo crear un plan de negocio, cómo posicionar la marca, el manejo contable de la misma, entre otros.
Meyling cuenta que decidió estudiar arquitectura en lugar de carreras vinculadas a la actividad agropecuaria porque quería dar un salto del campo a la ciudad, sin imaginar que luego su vida estaría siempre vinculada al café.
EL CRECIMIENTO
La casa de una de ellas se ha convertido en centro de producción. Ahí tienen las maquinarias que a lo largo de estos años han venido comprando para procesar el café que traen de San Juan del Río Coco.
La primera tostadora la compraron ahorrando los pagos que obtenían por los servicios de arquitectura, hasta completar dos mil dólares.
Y es que las ventas han venido en crecimiento. Cuando comenzaron, apenas colocaban diez libras mensuales de café gourmet y desde entonces la han elevado a cien libras cada mes o más, precisa Meyling.
El secreto del crecimiento de la demanda de este negocio, según Aracely, se debe a que conversan personalmente con los clientes y “observamos gustos, tendencias, costumbres” para ir mejorando el producto.
A eso se suma otro valor agregado: “La calidad y frescura del café, el arte en el empaque y la calidez en el servicio, además de la oferta de variedades de café arábica como maragogipe, caturra, catuaí sin hacer blend o mezclas entre estas”.
Además “actualmente ofrecemos el servicio de café por eventos, la personalización del empaque para bodas, aniversarios, organismos, instituciones y más”, afirma Aracely.
Cuando Aracely y Meyling decidieron poner la renuncia a sus respectivos empleos, el miedo estuvo presente, pero se mostraron confiadas en que estaban tomando la decisión correcta. Es por ello que Aracely recomienda a los jóvenes que quieran emprender “primero deben estar claros de lo que desean, confíen en sus instintos y capacidades, buscar capacitaciones continuamente, hacer alianzas estratégicas, participar en concursos, no desanimarse ante obstáculos, incomprensión o falta de apoyo. Atrévanse a hacer algo diferente por muy loco que parezca”.
TRAS LA CAFETERÍA
Pero el negocio de estas emprendedoras no se limita solo a vender café empacado. Ahora van por la cafetería micro-tostadora, “que está entre las últimas tendencias de cafés, donde prima la calidad y la frescura del café”.
Meyling cuenta que ya tienen preaprobado el préstamo con una institución bancaria, y esperan abrir el local en diciembre en Los Robles, donde ya tiene contratado el sitio.
Pero para llegar a realizar ese sueño, estas ahora empresarias admiten se han tropezado con las barreras que sufren los emprendedores. “Como jóvenes emprendedoras hemos tenido dificultades económicas, logísticas, tecnológicas y fiscales, debido a la falta de conocimiento o preparación en estos temas. Algunas se resuelven sin tantos inconvenientes otras en cambio no dependen de nosotras”, afirma Aracely.
Y añade: “Una de las mayores dificultades ha sido el acceso a crédito, porque no teníamos ninguna garantía que ofrecer a las instituciones financieras más reconocidas del país”.
No obstante, resalta que “la falta de financiamiento para invertir y avanzar un poco más ha sido un obstáculo pero nos ha dado tiempo para corregir los errores durante el proceso”.
CONTACTO
Propietarias: Meyling Moreno y Aracely Vélez.
Correo electrónico: [email protected]
Teléfono: (505) 8508 2162 / 8788 6275.
